Nombre: Tony Yef Blanco.
Edad: veintitantos.
Objeto personal: Su moña (la bamba).
Frase de cabecera: “No entiendo”
Fue rechazado de: Protagonistas de novela.
Razón: por hueco.
Comida favorita: (No sabe / No responde)
Profesión: Empezó a trabajar como pisapapeles en la oficina de su padre hasta que un cazador de talentos lo contrató como modelo de ropa interior masculina.
Observaciones: La imagen de Tony en interiores está presente en todas las calles de las ciudades del país. El rumor dentro del medio del modelaje es que el cerebro de este participante fue vendido a un empresario japonés para poder pagar una operación de la cadera de su hermana. De todas maneras este personaje se caracteriza porque su cráneo es una especie de imán que atrae paredes, puertas, mesas y vidrios. El aporte de Tony Yef es una visión transparente e irreflexiva de las cosas que pasan. Es bien bruto y fue escogido en un proceso de selección en el que se impuso sobre Jean Claude Van Dame y un muñeco de parlante de Tribilín. Tony fue el elegido cuando se acabaron las pilas del muñeco.
Quiero ser un Umpa-Umpa se publicó originalmente en Revista Shock
Quiero ser un Umpa-Umpa se publicó originalmente en Revista Shock
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